Valoraré vuestro caso, permitiendo que tu perro muestre el origen de sus necesidades, cambios de comportamiento, traumas y miedos, facilitándole herramientas para superarlos.
Desde el primer día verás reducir el estrés en casa. Comunicarte con tu perro, comprenderlo y permitirle participar en su proceso de recuperación.
Os acompañaré a través de la empatía, la educación canina respetuosa y terapias naturales adaptadas sólo para vosotros y seguimiento cercano. Podréis relajaros juntos y confiar.
Juntos obtendremos un proceso amable para avanzar hacia la calma, confianza y bienestar.
Un estado contínuo de nervios, dificulta y acentúa la gestión emocional de las situaciones, llevando a conductas obsesivas, reactividad, miedos e inseguridades.
A la larga, genera problemas digestivos, de piel, aumento del dolor...entre otros.
La educación canina respetuosa combinada con terapias naturales, os permitirá avanzar hacia el equilibrio y bienestar.
Los miedos tienen diferentes orígenes que conviene evaluar.
Respetar su miedo es el primer paso para superarlo.
Trabajaremos juntos para reforzar la confianza en sí mismo y vuestro vínculo: la confianza en ti como referente de calma y seguridad.
No hay perros dominantes o agresivos sinó comportamientos agresivos.
El origen de este comportamiento es el miedo.
Realizaré una evaluación y os daré pautas y ejercicios para mejorar vuestro día a día, con apoyo emocional a ambos, siempre respetando el ritmo y necesidades del perro.
Un día... no quiere salir a la calle, tiene más miedo, te muerde si le tocas, se esconde y aparta de ti, no tolera a ciertos perros...
Algo trata de decirte tu perro. Lo primero es una revisión veterinaria. Una vez confirmado o descartado el diagnóstico, revisaremos cómo puedes ayudarle desde la comprensión del lenguaje canino y adaptación a sus necesidades.
De repente...nuestro mejor amigo le han salido canitas y es ancianito.
En la etapa senior, la merma de facultades físicas y cognitivas, hacen que tengamos que adaptar tanto el entorno como nuestra relación con ellos para facilitarles esta etapa tan tierna y difícil a la vez.
Aprenderás a escuchar sus necesidades físicas, mentales y emocionales para hacer más amable su día a día.
Cuando nuestro perro sufre una enfermedad puntual o crónica, siempre podemos apoyar el tratamiento veterinario con terapias complementarias.
Sentirte acompañada, apoyada y escuchada para poder escoger las mejores alternativas para tu perro.